El periodismo es una de las profesiones más afectadas por las nuevas tecnologías… de la información. No debe ser solamente tema de debates en discretos congresos corporativistas. Nos interesa a todos, los reporteros, las personas de quienes hablamos en nuestros noticieros («newsmakers«) así como el público en general. Tal es el tema de «We The Media» (Nosotros los medios de comunicación) escrito por Dan Gillmor, columnista del diario de la Silicon Valley.

El meollo del planteamiento de Gillmor es que los «Big medios» tratan las noticias en forma de conferencia o de curso magistral (alguien sabe y difunde su conocimiento) mientras las nuevas tecnologías permiten abordarlas en forma de conversación o de seminario abierto. Tal evolución «obligará las distintas comunidades interesadas a adaptarse.»

San Francisco, California, 17.oct.04

Los actores del sector privado, de la política o del espectáculo deben aprender que ya no hay secreto. «La información es un océano, y los newsmakers ya no pueden controlar la marea tan fácilmente como lo hacían en el pasado,» escribe Gillmor.

Los periodistas deben asimilar que el público sabe colectivamente más que ellos sobre los temas que cubren. «Es cierto por definición,» escribe Gillmor. «Son muchos y a menudo somos apenas uno. Tenemos que reconocer y, en el mejor sentido de la palabra, utilizar sus conocimientos”.

Gillmor es uno de los primeros periodistas que haya publicado un blog en el sitio de su periódico, que haya entablado diálogo con sus lectores, integrado las informaciones que le mandan y tomado en cuenta sus puntos de vista.

Los públicos, de hecho, están «participando en la conversación». Es cierto de los bloggers, de quienes participan en los wikis o hacen incontables sitios de diferente índole en los cuales podemos encontrar información pertinente. Y es así que nace lo que él llama «periodismo multi-direccional».

La conversación es posible gracias al hecho que la internet es un medio que todos podemos tanto leer como escribir. Gillmor no duda que «cuando cualquiera puede ser escritor, en el sentido más amplio y para una audiencia global, muchos lo van a ser».

Hay riesgos, pero las oportunidades valen la pena. «Cuando eliminamos la barrera que permite cambiar las cosas, también eliminamos la barrera que permite componer lo que está roto.»

Gillmor cuenta con los «periodistas-ciudadanos» para componer muchas cosas en el campo de la información. «Las realidades económicas del periodismo moderno corporativo hacen que los problemas de nuestros tiempos son demasiado complejos y tienen demasiados matices para ser cubiertos de manera satisfactoria por los medios más importantes.» Cuando los presupuestos para los noticieros se van secando, el público que quiere tener información tiene que «meterse en la conversación».

Para que esto funcione, Gillmor está convencido de que importa preservar, extender, generalizar los sistemas abiertos, los que promueven la participación de quienes están en los márgenes y no en los centros de poder.

La noción proviene de la lucha llevada por Linux, Wikipedia y ciertos programas de distribución de música P2P para limitar el impacto de empresas (Microsoft, Apple, Oracle y las disqueras, entre otras) que quieren abusar del derecho de propiedad intelectual.

El caos siempre es un riesgo, pero Gillmor no le teme tanto como lo que llama «la santa alianza entre «la industria de la diversión – la que llamo el ‘cartel de la propiedad intelectual’ y el gobierno.»

La importancia de las TIC para la sociedad en general no es nada nuevo. La imprenta, a la cual debemos libros y periódicos dio lugar al fin de los clérigos y a la primera producción en cadena de la era industrial.

Uno puede considerar que Gillmor peca por exceso de optimismo. También, puede combatir sus tesis por peligrosas. Algo, sin embargo, no se le puede reprochar: la falta de coherencia.

El mismo día en el cual el libro salió en las librerías, el editor O’Reilly publicó una versión digital que cualquiera puede bajar y leer (oreilly.com/catalog/wemedia). Este sistema conocido como «Creative Commons» (Comunidades Creativas) reserva «ciertos derechos» y no todos.

We The Media

J’enquête, je suis et j’analyse les technologies de l’information et de la communication depuis la préhistoire (1994). Piqué par la curiosité et l’envie de comprendre ce que je sentais important,...