Los grandes suelen llegar tarde. Bill Gates promueve los blogs frente a los empresarios y los jóvenes fundadores de Google apuestan una parte de su brillante futuro sobre su crecimiento exponencial, pero el movimiento no esperó su bendición. Los «blogueros» están a punto de llegar a los diez millones. Los lectores de esas bitácoras en línea son entre cuatro y cinco veces más numerosos. Este nuevo fenómeno que trastoca los medios de comunicación, la política y la vida íntima está sacudiendo también al mundo de los negocios, último sector vital en adoptar este modo de expresión después del correo electrónico y las mensajerías instantáneas.
San Francisco, 30.may.04
Empresas de todo tipo mantienen sus blogs. Impactan más cuando pertenecen a sectores sin relación directa con la informática. Por ejemplo StonyField Farm (stonyfieldfarm.com), una compañía de productos lácteos, tiene cinco. Y estos tratan de la labor realizada para mantener yogures de calidad, o de los esfuerzos realizados «para reducir el impacto de la empresa sobre el medio ambiente». Sirven para la relación con los clientes y para la imagen de la empresa. Entre otros ejemplos podemos señalar un restaurante (club95.net), una tienda de artista (www.loosetooth.com), una sociedad que vende cajas personalizadas para CDs (www.jewelboxing.com) y un agente de bienes raíces (oakvillerealestate.journalmine.com).
Numerosos consultores los utilizan para mostrar como se mantienen al día. El patrón de Jupitermedia una de las principales fuentes de información sobre la internet tiene el suyo (weblogs.jupitermedia.com/meckler) así como trece de sus analistas (weblogs.jupiterresearch.com). A fines de mayo el blog de Michele Miller (www.wonderbranding.com) especialista en mercadeo para mujeres, ofrecía datos sobre el hecho que 40% de los fan del fútbol americano son hembras y que el poder de compra de los Latinos en EEUU rebasará el trillón (millón de millones) de dólares en el 2010. Poderosos argumentos para contratar a una señora que parece saber llegar a tan vasto público.
Muchos medios de comunicación publican bitácoras de sus periodistas, desde la cadena de televisión por cable MSNBC hasta un diario local de Idaho, el Spokesman Review (spokesmanreview.com/blogs).
Dentro de las centenas de bitácoras de empleados de Microsoft vale la pena destacar Channel 9 (channel9.msdn.com) escrita por cinco de ellos para mantener el diálogo con los desarrolladores. Google tiene la suya (google.com/googleblog), lo cual es normal para una empresa que compró el año pasado uno de los programas más populares para «bloguear» (blogger.com), que acaba de volver a lanzar con un interfase simplificado.
El camino fue abierto en el 2002 por Macromedia en ocasión del lanzamiento de una nueva gama de productos. Los dirigentes dejaron que los responsables abrieran sus propios blogs para explicar las innovaciones y escuchar las críticas y sugerencias de sus usuarios. Esos blogs no son publicados en el sitio de la compañía, lo cual les da una mayor autonomía.
El mundo empresarial no podía ignorar el fenómeno. En abril del 2001, estimábamos a 150,000 el número de blogueros y a 500,000 en mayo del 2002. Los estimados actuales varían entre cuatro y nueve millones. El sitio de Technorati.com ya registró 2,5 millones de ellos en EEUU y agrega cerca de 11,000 más cada día. Ya el año pasado más de un 10% de los internautas solían consultar bitácoras en línea.
Una de las experiencias concretas más convincentes del impacto que pueden tener en los negocios es dado por el bloguero estrella Andrew Sullivan (andrewsullivan.com) cuyo sitio atrae cada día 100,000 internautas (más que varios diarios de ciudades importantes). Cuando invitó sus lectores a discutir libros para los cuales ofrecía un enlace a Amazon.com, propulsó el primer título al quinto lugar de la lista de bestsellers de la compañía y el último al quinto lugar.
El mundo de los negocios está adoptando los blogs por la sencilla razón de que los internautas aprecian este medio de comunicación que permite establecer relaciones más directas y humanas. Al hacer esto están cambiando el papel del consumidor y la vida interna de las empresas.
Continuará…
