La visualización del texto es el eslabón faltante del multimedia. Alivia la carga debida al exceso de información. Entendemos por visualización del texto la representación gráfica de ciertos elementos para facilitar la ubicación (y no la sustitución del texto por imágenes, arte de otra naturaleza). El principio podría ser utilizado para ubicar porciones de un mismo texto, empezando por los artículos de periódicos, pero en la era de la internet, se aplica esencialmente a la búsqueda de documentos.
San Francisco, California, 4.ene.04
Según Ramana Rao, analista y vicepresidente de Inxight, una sociedad especializada en el uso de recursos visuales para la gestión del conocimiento «la visualización del contenido permite que la gente vea y se dirija, pero – y esto es muy importante -, permite ver hacia donde se dirige, en donde ha estado, adonde va a ir antes de ir etc.»
Para ubicarnos en el mundo real solemos usar mapas. Es lo que ofrece Grokker, un programa lanzado a fines del 2002 (ver El Norte del 28 de octubre del 2002) y cuya versión 2.0 acaba de salir.
Grokker presenta la información encontrada por otros, y accesible gracias a un plugin gratis, bajo forma de círculos y cuadros encajados los unos en los otros: los mapas.
«La representación visual habla directamente al cerebro. Estamos acostumbrados a reconocer colores y formas sin tan siquiera pensarlo», nos había explicado J-M Decombe, principal autor del programa en ocasión de la salida de la primera versión. Fácilmente distinguibles aun sobre superficies mínimas, los colores permiten que el ojo se ubique de manera instantánea. En los mapas abstractos de Grokker las formas encajadas sirven de contexto. Un solo clic permite al usuario volver atrás o profundizar su búsqueda.
La primera versión fue celebrada como uno de los software más prometedores del momento. Tuvo notable éxito entre investigadores. Escuelas de Los Ángeles y Chicago lo están probando. La librería de la Universidad de Stanford está interesada. La Universidad de Nevada lo compró. Resulta probablemente más rápido usar directamente Google para encontrar una información sencilla como el sitio de una empresa, pero cuando se trata de indagar entre interminables listas de documentos, Grokker es realmente útil.
La primera virtud de la nueva versión, sobre todo para los investigadores, de recursos generalmente modestos, es que el precio fue recortado a la mitad. Cuesta ahora 50 dólares y puede ser probado gratis durante un mes.
La nueva versión ofrece dos cambios mayores que J-M. Decombe nos explicó por mail. La primera es «la simplificación del interfase con el usuario». Todo lo que necesita es visible en cualquier momento. En cuanto al fondo, el salto cualitativo es «la categorización automática de la información ofrecida por cualquier fuente». La versión actual permite visualizar las informaciones recogidas simultáneamente (meta búsqueda) por seis motores (Alta Vista, Fast, MSN, Teoma, WiseNet y Yahoo) y agrupadas en categorías significantes. Un plugin permite visualizar y categorizar todo lo que ofrece Amazon.com. Otro sirve para encontrar los documentos del disco duro de su máquina.
Hasta ahora, el esfuerzo más interesante en materia de categorización era ofrecido por el motor de búsqueda Vivísimo. Una búsqueda sobre México, por ejemplo, reagrupa los resultados en: Nuevo México, viaje, negocios, Ciudad México, país, historia etc. Vivísimo acaba de lanzar una MiniBar que se puede agregar a la que uno ya tiene instalada (la de Google por ejemplo). En caso de exceso de información permite con un solo clic reagrupar los resultados encontrados. Juntos, son una maravilla, pero al agregar la visualización Grokker facilita más el trabajo, algo nunca despreciable.
Decombe promete un plugin para Google «a fines de enero a más tardar». Veremos entonces lo que la visualización aporta. Otros plugins seguirán, para eBay y para sitios de redes sociales como LinkedIn.
La primera versión era visualmente fascinante – algo difícil de dar cuenta con puras palabras -, pero Grokker 2, nos explicó Decombe, «nos solamente es bonito (pretty), también es inteligente (smart) y por lo tanto útil (useful)».
